OTRA VEZ ESPAÑA: UNA MOCIÓN, UN NUEVO GOBIERNO
España,
a partir de la muerte del caudillo Francisco Franco no ha dejado de
sorprendernos, con diversas y esperanzantes acciones democráticas.
Desde la mismísima preparación e investidura de Su Majestad Don
Juan Carlos de Borbón, que apostó por una monarquía republicana.
El esforzado y brillante trabajo de Don Adolfo Suárez como artífice
(no único pero sí principalísimo) del Pacto de la Moncloa, creador
de la moderna constitución española, que privilegió las
coincidencias sobre las disidencias. La gesta de S.M. Don Juan Carlos
cuando la irrupción del Teniente Coronel Antonio Tejero, tomando con
el apoyo de un grupo de las fuerzas armadas el Congreso de los
Diputados. La vocación iberoamericana de la corona española. Las
alternancias de los jefes de gobierno en el que la jefatura de estado
encarnada por el Rey ha mantenido la unidad y la continuidad, la
solución final de la
negra etapa de la ETA hasta su solución final hace unas semanas y
ahora, la primera ocasión en que una moción de censura obliga la
renuncia del jefe de gobierno y se entrega, mientras se convoca a
elecciones generales, al propuesto en la moción.
El
vaso estaba copeteado. Al gobierno de Mariano Rajoy se le había
imputado todo. El caso de Cataluña ha sido un dolor de muelas para
España y para Europa, posiblemente mal manejado desde el gobierno
central español. La gota que derramó el vaso es la
sentencia de
la Audiencia Nacional en el llamado Caso Gürtel
condenó
a 351 años de cárcel a 29 de los 37 acusados, consideró
probado que entre los años 1999 y 2005 el grupo de empresas de
Francisco Correa y el Partido
Popular
se tejió en diferentes territorios una "estructura
de colaboración estable" que
llevó a un "auténtico y eficaz sistema de corrupción
institucional a través de mecanismos de manipulación de la
contratación pública central, autonómica y local".
Los
jueces estiman
que
los acusados cometieron delitos de asociación ilícita, fraude a la
administración pública, cohecho (activo y pasivo), falsedad en
documento mercantil, malversación de caudales públicos,
prevaricación, blanqueo de capitales, delitos contra la hacienda
pública, tráfico de influencias, apropiación indebida, exacciones
ilegales o estafa procesal intentada. Incluye
28
delitos de prevaricación que
alcanzan a 194 años de inhabilitación para los condenados. Detalla
24
delitos de cohecho que
recaen sobre 12 personas, 26
de blanqueo, 36 de malversación y 20 delitos contra
la hacienda pública. La sentencia de 1.687 páginas, incluye un
total de 165 penas.
Los
hechos se
sitúan entre los años 1999 hasta 2005,
con algunas
actividades muy concretas posteriores, en relación con la
organización encabezada
por Francisco Correa (Gürtel
en alemán) y
actividades
realizadas con gobernantes provenientes del Partido Popular,
en la localidad malagueña de Estepona, en los municipios madrileños
de Majadahonda (2001 a 2005) y Pozuelo (2003 a 2005), municipio de
Madrid (2002), Comunidad de Madrid (2004 a 2008) y Comunidad de
Castilla y León (2002 y 2003).
La
sentencia destapó la caja de Pandora y al fondo como en la narración
mitológica apareció una pequeña figura que empezó a crecer y
tomar forma, la esperanza encarnada en la moción de censura. Esta
figura propia de los gobiernos parlamentarios se asemeja por su
finalidad a lo que el Sr. López Obrador ha propuesto como la
“revocación del mandato”. En
España la
moción
de censura es
un mecanismo por el que
el Congreso de los Diputados exige
responsabilidad política al Gobierno y su objetivo es confirmar si
el presidente del ejecutivo
cuenta con el apoyo de esta cámara. Para presentarse debe contar con
el apoyo
de al menos un 10%
(35
diputados) para aprobarse necesita mayoría,
es decir, al menos el apoyo de 176 diputados.
Aprobada
la moción, el presidente del Gobierno está obligado a dimitir ante
el Rey, y a continuación el propuesto en la moción jurará su cargo
también ante el jefe del estado, integrará su equipo de gobierno y
habrá de convocar a elecciones generales. Conviene recordar que
el Partido Socialista Obrero, el de Pedro Sánchez, sólo cuenta con
84 diputados, sin embargo en la sesión extraordinaria estuvieron
presentes los 350 diputados de las Cortes, y el resultado fue:
180
síes, 169 noes y 1 abstención. La
moción de censura recibió el respaldo del Pleno tan
solo por cuatro votos mas de los necesarios.
No
corrió la sangre y esperamos que no corra, con un civismo ejemplar
el Congreso español cumplió su función y destituyó al Presidente
del Gobierno. El Jefe de Estado, el Rey, que en una república
monárquica cumple la función de dar unidad, cohesión, continuidad,
representación, y sentido a la nación, o, como en el caso de
España, a las diversas naciones que forman el reino, cumplió su
función también, recibió la renuncia de Mariano Rajoy y la promesa
de Pedro Sánchez, y al día siguiente volvió a salir el sol, el
gobierno continuó trabajando, el país siguió andando y el pueblo
español, sin duda perplejo, apreció como los mecanismos
democráticos de control del gobierno plasmados en su constitución,
funcionaron a plenitud.
Sin
duda la que si correrá y mucha será la tinta. Sin duda ocupará un
lugar preminente en las reflexiones públicas y privadas la
cuestión del “precio” que Pedro Sánchez,habría pactado por los
votos de apoyo de los partidos opositores, que le permitieron sumar
la mayoría absoluta que requería la moción de censura. El apoyo
vascuence y el catalán, no puede menos que despertar recelo para los
que apostamos por una España unida y que vemos a los nacionalismos,
Octavio Paz dixit, como una aberración de la cultura. De la sesión
extraordinaria merece la pena rescatar la intervención de la
diputada canaria Ana
María Oramas González-Moro,
quien
en una extraordinaria pieza oratoria advirtió a Pedro Sánchez el
peligro de pactar con quienes quieren “romper a España”.
Pocos
países en el mundo han sido crisol de tantas razas y culturas como
lo ha sido España, pocos han tenido la vocación mística,
aventurera, artística, visionaria y
en un tiempo retardataria, pocos que hayan enarbolado el pendón de
la conquista y al mismo tiempo el del derecho de gentes, su historia
y su obra ha sido de claroscuros en que sin los últimos las luces no
resplandecerían.
Una
vez mas España nos ha dado una admirable lección de democracia.
¡Qué sea para bien de ella, de los españoles y de los pueblos que
llevamos como destino, sangre de ese crisol milenario!.
"Cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar! Felicidades por la publicación, Saludos!
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